Destruimos los argumentos y toda altivez que se levanta
contra el conocimiento de Dios; llevamos cautivo todo pensamiento a la
obediencia de Cristo
2 Corintios 10: 5 (RVA-2015)
¿Alguna vez te has sentido condenado por los malos
pensamientos que has tenido? Podrías estar en medio de una reunión de oración
cuando de repente un pensamiento sucio entra en tu mente. En realidad, es el diablo
quien pone esos pensamientos en tu mente. Luego, da un paso atrás y te dice:
"¿Cómo puedes llamarte cristiano y aún tener esos pensamientos?"
Yo vivía oprimido por causa de estos malos pensamientos, porque
sentía que tenía que confesar cada uno de ellos y buscar el perdón de Dios. Pero
esto no es lo que la Palabra de Dios nos aconseja. Date cuenta, Dios desea
que traigamos "todo pensamiento cautivo a la obediencia de Cristo".
Ahora, ¿en qué obediencia debemos enfocarnos? ¡En la obediencia de Cristo y no en
nuestra propia obediencia!
Pero, ¿qué significa "la obediencia de Cristo"? Es
Su obediencia en la cruz, donde "por la obediencia de uno, muchos serán
justificados" (Romanos 5:19). Jesús derramó Su sangre por nosotros en la
cruz. Esto significa que cuando nuestros pensamientos nos condenan, debemos
enfocar nuestros pensamientos en la obediencia de Jesús en la cruz.
Amado, el diablo solo puede incursionar en nuestras mentes
cuando logra que nos enfoquemos en nuestra obediencia en lugar de la obediencia
de Cristo. Su estrategia es señalarnos nuestra obediencia o la falta de ella
para determinar nuestra posición ante Dios. Pero así como nuestra posición como
pecadores no se basa en lo que hacemos, sino en lo que hizo el primer Adán, de
la misma manera, hoy ya somos justos por siempre, no por lo que hacemos, sino
por lo que Cristo, el último Adán, hizo en la cruz.
Entonces, la próxima vez que tus pensamientos parezcan
condenarte, di: “Soy justo, ya sea que tenga buenos o malos pensamientos. Mi
justicia no tiene nada que ver con mi obediencia. La obediencia de Jesús en la
cruz me hizo justo". Continúa orando, sabiendo que tienes acceso a Dios y a
Su favor, y que Él escucha la oración de los justos (Proverbios 15:29).
Traducido de daily Grace Inspiration Joseph Prince
Si deseas experimentar
la salvación de Dios en tu vida has esta pequeña oración:
Dios confieso con mi
boca que Jesús es el Señor y creo en mi corazón que tú lo levantaste de los
muertos, Amén.
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