Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo,
como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar
1 Pedro 5: 8
El diablo no quiere que te fortalezcas en el amor que el
Señor tiene por ti. Al contrario, él quiere que cuestiones el amor de Dios por
ti. Para lograr esto, una de sus estrategias clave es tratar de hacerte pensar
que Dios está enojado contigo.
La Palabra de Dios nos dice que el diablo camina como un
león rugiente, buscando a quién devorar. Esto significa que no puede devorar a
nadie. Debe buscar a aquellos a quienes pueda devorar. Algunos de nosotros
somos "Indevorables". Tal vez no exista esta palabra propiamente
dicha; pero ciertamente describe una gran posición cuando el enemigo está al
acecho de su próxima víctima y no puede devorarte.
Mi amigo, puedes convertirte en un "Indevorable"
para el diablo. El secreto se encuentra en el versículo anterior, "echando
toda vuestra ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de vosotros." (1
P. 5: 7). ¿Te das cuenta? ¡El secreto para ser "Indevorable" es no
preocuparse y no dejarse envolver por las ansiedades y los problemas! Ríe mucho,
disfruta de tu vida y no centres tu atención en el mañana.
Para la mente legalista, esto suena terriblemente
irresponsable. Sin embargo, en la mente de Dios, ¡Tu mayor responsabilidad es
regocijarte en el Señor siempre y no preocuparte por tus fracasos pasados, tus
circunstancias actuales y tus desafíos futuros! ¿Cuál es la razón? Esto es debido
a lo que la gracia de Dios ya ha logrado por ti. Y esto es porque Aquél que
tiene el poder sobre la muerte cuida y vela por ti justo en este mismo momento.
Si deseas ver la victoria sobre los ataques del enemigo,
aprende a relajarte, a dejar ir y a liberar cada pensamiento opresivo,
preocupación y ansiedad dejándolos en las manos amorosas de Jesús. Cree con
todo tu corazón que Él tiene cuidado de ti y que no estás solo en este viaje. En
Jesús tienes a un compañero que está constantemente contigo en esta gran
aventura llamada vida.
Date cuenta que el diablo camina como un león rugiente. El
diablo es un impostor que trata de intimidarte dándote la impresión de que Dios
está enojado contigo. Seamos claros aquí: solo hay un verdadero león y ese es “El
León de Judá, Jesucristo” (ver Apocalipsis 5: 5) “El Rey de reyes”, y Él no
está enojado contigo. La ira de Dios sólo está dirigida contra todo aquello que
quiere destruirte. Tú no eres el objetivo de su ira; tú eres el objetivo de Su
amor. Así que fortalécete en Su amor por ti. ¡Esa es la manera en la que
resistes al diablo y él no tendrá más remedio que huir de ti!
Traducido de "Meditate Devotional" Joseph Prince
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