viernes, 10 de enero de 2020

Sigue al señor

Por tanto, Hebrón vino a ser hasta hoy heredad de Caleb… porque siguió plenamente al SEÑOR, Dios de Israel.
Josué 14:14  (La Biblia de las Américas)

¿En qué está enfocada tu mirada? ¿Está enfocada en la oscuridad que hay en el mundo? ¿O está fijada en la palabra del Señor con respecto a tu vida? Mi intención principal en este devocional es que tus ojos se aparten de la destrucción que ves todos los días y se dirijan a nuestro hermoso Señor Jesús.

¿Sabes cuál fue el secreto para que Caleb tuviese una larga vida? El pasaje que acabamos de mirar nos dice que él simplemente se encontró siguiendo al Señor. Hebrón era el nombre de una de las ciudades de refugio. En hebreo, "Hebrón" significa compañerismo o asociación. Esto habla de intimidad, cercanía y conexión con el Señor.

No hay fórmula para obtener larga vida. Se trata más bien de tener una relación íntima con Jesús. Nuestro Señor Jesús es el camino, la verdad y la vida. Él vino para que tengamos vida y la tengamos más abundantemente. Síguelo y encuentra el camino hacia una vida larga y abundante. No olvides que todo lo que experimentó Caleb lo experimentó estando bajo el antiguo pacto. Él experimentó renovación de juventud, vigor incesante y largura de días bajo el antiguo pacto. ¡Cuánto más deberíamos estar experimentando renovación de juventud, energía ilimitada y largura de días bajo el nuevo pacto de gracia que fue establecido sobre mejores promesas (ver Heb 8: 6)! ¡Amén!

En un salmo que Moisés escribió, dice: “Los días de nuestra edad son setenta años; y si en los más robustos son ochenta años, (Sal. 90:10). Algunas personas; por lo tanto, han usado esto para determinar que nuestra esperanza de vida, se encuentra entre setenta y ochenta años. Pero es importante que interpretemos este salmo en el contexto de que los hijos de Israel se encontraban aquí en el desierto y bajo la ira de Dios. También hemos visto que incluso bajo el antiguo pacto, Caleb trascendió esta esperanza de vida y aún seguía fuerte a los ochenta y cinco años.

Por lo tanto estimado lector, tú que estás bajo el nuevo pacto, te animo a apuntar alto. No te conformes con vivir hasta los setenta u ochenta años, cuando Dios ha prometido: " Lo saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación." (Sal. 91:16). Tu satisfacción es el límite y de acuerdo a tu fe, te sea hecho. Oro para que, al permanecer cerca de nuestro Señor Jesús, vivas una larga vida, vivas fuerte y vivas bajo el abrigo protector de sus alas.

Traducido de "Meditate Devotional" Joseph Prince

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