Juan 8:11
He recibido muchos testimonios de personas que han sido
liberadas de hábitos destructivos. Estas son personas preciosas y sinceras que
deseaban experimentar avances, pero no sabían cómo. Sin embargo, cuando
aprendieron acerca de la justicia que proviene de Cristo; no de las obras suyas,
ellos comenzaron a confesar que eran la
justicia de Dios cada vez que se sentían tentados. Y poco a poco, ¡mientras más
creían que eran justos en Cristo, y se negaban a aceptar la condenación por sus
errores del pasado y por la tentación actual, más eran liberadas de las adicciones
que los ataban!
Amado, no es el deseo de Dios que peques, porque el pecado
te destruirá. Pero incluso si has fallado, debes saber esto: ¡No hay condenación porque estás EN CRISTO
JESÚS, tus pecados han sido lavados por Su sangre! Cuando Dios te mira, Él no ve
tus fracasos. ¡Desde el momento en que aceptaste a Jesús como tu Señor y
Salvador personal, Dios te mira en Cristo resucitado, sentado a Su diestra! ¡De
la misma manera como Jesús está libre de culpa y de mancha, así eres tú! Dios
envió a Su Hijo a morir por ti en la cruz, cuando aún eras un pecador.
Obviamente, no tienes que ser perfecto en conducta y en pensamiento para que
Dios te ame. ¡Recibe, hoy, nuevamente Su amor incondicional y El regalo de la
justicia que proviene de Él y se libre de todo pecado y de toda adicción en tu
vida!
Extraído de Joseph Prince:”Meditate for success”