viernes, 10 de enero de 2014

Pon la medicina de Dios dentro de ti

Medita

Hijo mío, está atento a mis palabras... No se aparten de tus ojos; Guárdalas en medio de tu corazón; Porque son vida a los que las hallan, Y medicina a todo su cuerpo.
Proverbios 4:20-22

Uno de mis héroes de los años 1800 es un hombre de fe llamado George Muller. Con fe en Dios, construyó cinco grandes orfanatos que albergaban unos 2.000 huérfanos anualmente. Él nunca pidió dinero a nadie, sino que trajo cada necesidad delante del Señor. Literalmente oró por millones de dólares a lo largo de su vida para mantener en marcha a esos orfanatos.

Muller hizo la obra del Señor todos los días incansablemente. Incluso a los 70 años inició un período de 17 años de viajes misioneros y predicó en casi 40 países. Él viajó más de 200,000 millas, un logro increíble en tiempos de pre - aviación. A los 93 años, después de haber sido visitado por dos amigos más jóvenes, comentó posteriormente con gratitud a Dios que él era mucho más enérgico que ellos, sin molestias ni dolores.

Amigo, ¿quieres saber cuál era uno de los secretos de Muller para tener una vida larga y saludable? ¡Fue su amor por sumergirse en las Escrituras, y su vida fue un testimonio del constante poder de recuperación que la Palabra ejerció en todo su ser!

Si tu salud ha estado mal últimamente, métete en la Palabra. Pídele al Señor que te dé un renovado amor por Su Palabra. Satura tu corazón y tu mente con Sus palabras de vida cada día. Puedes comenzar a leer los milagros de sanidad de Jesús. Mira Su amor y compasión por los enfermos, y Su voluntad para sanarlos. Anota un par de escrituras sobre sanidad y medita en ellos, habla esos versículos sobre tu cuerpo y guárdalos en medio de tu corazón. ¡Amado, descubrirás que la Palabra de Dios ciertamente es vida y salud para todo tu ser!

Extraído de Joseph Prince:”Meditate for success”

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