(Consejos que trascienden en la vida)
La obra completa de Cristo Jesús revela una de las más grandes bendiciones que tenemos como creyentes: Somos miembros de la familia de Dios. Él ha venido a ser nuestro Abba, Padre, y ahora somos Sus hijos herederos en Cristo. ¡Tenemos un trato de familia!
En Proverbios 3 podemos ver cómo opera nuestro Padre Dios, y sirve también como un fundamento clave para la relación entre padres e hijos. Aquí, vemos consejos paternales que enriquecen la vida de los hijos y que les ayudará aun cuando sean adultos, estos consejos se convertirán en una herencia poderosa para su descendencia.
Nuestro Padre Dios, en primer lugar, establece la relación que tenemos con Él y que siempre nos recordará que tengamos en cuenta Su consejo sabio: (veámoslo en la versión NTV)
“Hijo mío, nunca olvides las cosas que te he enseñado;
guarda mis mandatos en tu corazón”.
Para luego explicarles los beneficios:
“Si así lo haces, vivirás muchos años,
y tu vida te dará satisfacción”.
¡Son consejos que alargarán años a tu vida y te traerá grandes beneficios!
Continúa diciendo:
“¡Nunca permitas que la lealtad ni la bondad te abandonen!
Átalas alrededor de tu cuello como un recordatorio.
Escríbelas en lo profundo de tu corazón”.
En la versión AMP, nos dice: “No dejes que la misericordia, la bondad y la verdad te abandonen [en cambio, deja que estas cualidades te definan]”. ¡Dios quiere que seas reconocido como alguien que es fiel y verdadero!
“Entonces tendrás tanto el favor de Dios como el de la gente,
y lograrás una buena reputación”. ¡La multiforme gracia de Dios operará en ti y la gente tendrá en buena estima!
Por eso, sabiendo el valor de Sus consejos:
“Confía en el Señor con todo tu corazón;
no dependas de tu propio entendimiento”.
¡Ten confianza en los consejos que Dios te ha dado, porque en esas palabras están Su sabiduría y poder!
¡No sostengas tu vida basado en tus propias ideas o invenciones!
¡Deja que Su sabiduría e inteligencia guie tu vida!
¡Su gracia es más que suficiente!
Tomado de TeleiovMinistries del Pastor Jorge Soria
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