jueves, 21 de junio de 2012

Mira la palabra, no los hechos naturales


    Números 21:9
    9 Y Moisés hizo una serpiente de bronce y la puso sobre un asta; y sucedía que cuando una serpiente mordía a alguno, si éste miraba a la serpiente de bronce, vivía.
"Pastor Prince, yo sé que Dios es mi sanador. Pero ¿por qué  está esta enfermedad y este dolor aún en mi cuerpo?" Si usted ha estado mirando a su enfermedad y al dolor durante todo este tiempo, deja de mirarte a ti mismo y empieza a mirar a Jesús. ¿Tomó o no tomó Él sobre sí mismo tu enfermedad y dolor?

La Palabra de Dios declara: "Ciertamente llevó Él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores- Él los ha cargado..." (Isaías 53:4, YLT) Puesto que Jesús ya ha tomado tus enfermedades y dolores en la cruz, entonces Él no pudo haberlos dejado de tomar. Incluso si usted lo encuentra difícil de creer que Jesús ha pagado por su sanidad, sobre todo cuando el dolor es insoportable, la verdad es que aún por aquello está pagado. ¡Se trata de una obra terminada!

Dios no está diciendo que tu enfermedad no existe, ni está pidiéndote que pretendas que eso no está allí. Él está pidiéndote que apartes tu mirada de la enfermedad, o de lo doloroso que eso puede ser, y mires  la verdad que eso ya ha sido juzgado en la cruz en el cuerpo de su Hijo.

Una vez, cuando aún estaban en el desierto, los hijos de Israel fueron mordidos por mortales serpientes del desierto. Las serpientes eran reales. Las mordeduras fueron dolorosas y mortales. Así que Dios dijo a Moisés que dirija a la gente hacia la serpiente de bronce puesta sobre un palo - una imagen de la cruz. (Juan 3:14) Bronce significa juicio. En otras palabras, la serpiente, significa sus problemas, que ya fueron juzgados en la cruz.

Aquellos que mantuvieron sus ojos en la serpiente de bronce vivieron. Los que se enfocaron en sus heridas murieron. Así que deja de mirar tu enfermedad. En lugar de eso, mira a la cruz y vea su enfermedad “ya” juzgada en el cuerpo de Jesús. ¡Ciertamente él cargó con tus enfermedades y llevó tus dolores! Esa es la verdad de la Palabra de Dios. Y su palabra reemplaza a los hechos naturales.

Mi amigo, dejas que los hechos naturales te gobiernen o te estableces en las verdades de Dios sobre tu problema tú eliges en cuál de ellos te enfocas. Así que decide hoy no enfocarte en los hechos concernientes a tu problema. En lugar de eso, establece la verdad de la Palabra de Dios y la obra terminada de Cristo sobre tu problema, y viva

Extraído de Joseph Prince: "Daily Grace Inspirations"

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