8 Y Dios puede hacer que toda gracia abunde para ustedes, a
fin de que teniendo siempre todo lo suficiente en todas las cosas, abunden para
toda buena obra.
Si estuvieras en la misma sinagoga donde estuvo el hombre de
la mano seca (Lucas 6:6-11), ¿cómo lo verías y que le dirías?
Jesús estaba predicando en la sinagoga cuando vio al hombre
de la mano seca. Pero también miró la superabundante gracia en torno a esa mano
para la sanidad y plenitud. Él ve diferente a nosotros. Él mira lo invisible.
Él mira que el reino de Dios está aquí, siempre presente en cualquier
situación, con una superabundante provisión. Nosotros sólo vemos lo visible, lo
tangible, lo temporal y lo que parece tan real para nosotros.
Pero Jesús miró la superabundante gracia en esa mano seca
para la sanidad, porque no le dices a un hombre con la mano seca:
"Extiende tu mano", a menos que mires el suministro, la
sobreabundancia de plenitud para esa mano. Jesús llamó a existencia la superabundante
gracia para envolver la mano seca del hombre, y la mano fue sanada.
Es posible que alguien que está enfermo tenga la
superabundante gracia sobre él y sin embargo esa superabundancia de gracia no
sane su cuerpo. Eso es porque sigue reconociendo la falta o el problema que ve.
Él está más preocupado por lo que es visible y temporal.
En lugar de llamar a existencia, y reconocer y confesar la superabundancia
de la gracia de Dios, confiesa su circunstancia negativa todo el tiempo. Así
que, aunque la superabundante gracia está ahí, está ahí en vano. ¿No es triste eso?
Jesús llamó a existencia a la vida y la vida surgió a la visibilidad.
Necesitamos llamar a existencia aquello que deseamos ver. Diga: "Padre, te
doy gracias porque ahora mismo, aunque mi salud está bajo ataque, hay superabundante
gracia disponible para mi sanidad y mi salud. Lo llamo a existencia y recibo
ahora en el nombre de Jesús. ¡Amén! "
Mi amigo(a), no seas consciente de lo que ves, falta o carencia.
¡Se consciente de la superabundante gracia de Dios para ti mismo y aproveche de
ella!
Extraído de Joseph Prince: "Daily Grace
Inspirations"
No hay comentarios.:
Publicar un comentario