Romanos 4:7-8
La Nueva
Biblia de los Hispanos (© 2005 Lockman)
7 "Bienaventurados aquellos cuyas iniquidades han sido
perdonadas, y cuyos pecados han sido cubiertos.8 Bienaventurado el hombre
cuyo pecado el señor no tomará en cuenta."
Algunas personas piensan que si ellos fueran más "justos"
con Dios, entonces Él oiría sus oraciones. Por ejemplo, Ellos algunas veces
creen que si no han peleado con sus esposas o no han tenido aquellos malos pensamientos temprano en
el día, entonces Dios contestaría sus oraciones.
Dios no es así. Él quiere que sepas más allá de cualquier
duda, que siempre puedes venir a Su trono de gracia con audacia y tener plena
confianza que recibirás Su misericordia y Su gracia. (Hebreos 4:16) Vea, a causa de la obra terminada de Jesús en la
cruz, ya eres justo ante Dios. No necesitas hacer nada para hacerte más justo ante Dios.
¡De hecho, por la fe en Jesús, has recibido la justicia de
Dios mismo! (2 Corintios 5:21) Y no importa cuántos errores cometas, nunca
perderás esa justicia, porque, en primer lugar, Dios te la dio, no por tus
obras. (Romanos 4:5-6) En otras palabras, Dios no te imputó justicia porque fuiste
justo, sino porque creíste en Jesús.
A causa de lo que Jesús hizo por ti en la cruz, todos tus pecados
- pasados, presentes y futuros - han sido perdonados. ¡Dios nunca más se
acordará de tus pecados ni los tendrá en
cuenta en contra tuya! (Hebreos 8:12, 10:17)
Mi amigo, a causa de que Jesús ha sido castigado por tus
pecados, hoy, Dios no tiene en cuenta tus pecados en contra tuya. Esto
significa que tus pecados no le impedirán escuchar y responder a tus oraciones.
Así que siempre puedes correr a Su presencia sabiendo que puedes presentarte
valientemente y disfrutar de Su presencia y de Su amor.
Cuando sabes esta verdad, eso te hará libre en tu relación con
Dios. Puedes hablar con Él sin temor ni ningún sentimiento de condenación. Puedes practicar Su presencia y confiar en
que Él siempre te oye. En caso de que algo suceda en el hogar o en el trabajo, no
siempre tienes que llamar a los líderes
de tu iglesia – ¡Ora y Dios te oye!
Amado, tú eres justo en Cristo y Dios oye tus oraciones – ¡todo
a causa de Jesús!
Extraído de Joseph Prince: "Daily Grace
Inspirations"
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